¿Qué empleos seguirán siendo importantes a futuro? Ventas, una profesión que denota mucho del carácter y la capacidad de la persona. ¡Sobre todo a la hora de hacer una carrera! Créame, ganar comisiones muchas veces es el terror de la gente, ¡Si, terror! cuando todo lo contrario, puede ser la solución a los ingresos que muchas veces andamos buscando.
Hace poco hablaba con el gerente de una empresa que me decía: deje de contratar un vendedor, que me gustaba mucho. Su perfil llenaba las expectativas de lo que andaba buscando y me parecía que tenía habilidades especiales para persuadir la gente. Hasta que me dijo “mire, deme tanto. Y yo con eso me quedo tranquilo y lo hago facturar”. Allí mismo le di las gracias y lo pasé para una mejor ocasión, me contó.
Los incentivos en las empresas hoy están a la orden del día. Y van de acorde al cambio de los tiempos. Si usted lo piensa, en los años 50 el gran logro para un profesional era estudiar y trabajar. Pagarse su carrera universitaria, lograr ubicarse en una empresa grande, o transnacional. Tener ese súper puesto y luego, con el paso de los años, aspirar a un retiro.
¡De eso hace 5 décadas y ese pensamiento hasta hace poco, se empieza a cambiar! Esto con la llegada de los milleniales, la tecnología y el hecho que cada vez más gente trabaja desde su casa, por horas y por resultados. Pero parte de nuestra naturaleza humana es buscar la comodidad. ¡Queremos tener la certeza que sin importar que cada quince y cada treinta recibiremos un salario!
Es allí donde va mi admiración por aquellos que, sin temor al futuro, saben que ellos son los artífices de lo mucho o poco que ganen. Esas comisiones son ganadas a pulso y con mucho esfuerzo. Cada fin de mes toca adrenalina por llegar a las metas que la empresa nos ha establecido.
Y es precisamente eso lo que se premia. Esa capacidad que, por lo general, el sueldo base de un vendedor es bajísimo. El sueldo base, sólo es por si “tiene un mal mes” y no vende nada. Eso no debería pasar nunca con un vendedor efectivo. El sueldo base es por si padece alguna incapacidad y tiene que quedarse en casa. ¡Al menos lo básico lo tendrá!
Ahora bien, problema del sueldo fijo es que puede pasar dos años y no recibir un aumento de salario. ¡Porque probablemente usted este haciendo lo mismo, produciendo lo mismo y no existe motivo para pagar más, por lo mismo! Salvo que uno negocie su sueldo en dólares, cosa que difícilmente pasa, es raro que un sueldo se ajuste por los cambios de la moneda o aumento de la canasta básica.
Un vendedor se motiva así: “Este mes necesito hacer tanta plata, pues necesito cubrir estos gastos”, “Este mes voy a superar lo que hice el mes anterior”, pues, si logro ese bono, seguro ajusto para la cuota de algo. “Este mes voy a superar el número que hice el mes pasado, pues quiero ser en número uno en ventas”.
Amigo, toda persona que aspire a trascender profesionalmente, tendrá que tomar riesgos. Y que lo premien por su esfuerzo es uno de ellos. Pero abandonar la comodidad de un sueldo fijo y pasar a ganar por resultados, es lo más cercano que hay a emprender un negocio. ¡El día que quiera emprender, así será! Tanto vende, tanto gana. ¡Atrévase a que su esfuerzo sea quien le pague el sueldo! Y ventas.