Ibiza. Activistas climáticos de Futuro Vegetal pintaron este martes la fachada de la residencia del futbolista Leo Messi en Ibiza con pintura roja y negra para condenar la «responsabilidad de los ricos» ante la crisis climática.
El grupo expresó en sus redes sociales: «Nos enseñan que los poderosos son intocables. Es cierto que la políticas se redactan e interpretan al servicio de quienes más tienen, atentando directamente contra los derechos del resto de la población. Pero solo son el 1%.
Asimismo, publicaron: «Hoy 3 activistas han decorado la mansión ilegal de Messi. ¿Qué podríamos hacer si nos organizamos el 99% restante?».
Los activistas colgaron pancartas frente a la casa con lemas en inglés en los que proponían “ayudar al planeta, comerse a los ricos y abolir la policía”.
Los ambientalistas recuerdan un informe de Oxfam de 2023 que encontró que el 1% más rico de la población mundial emitió tanto dióxido de carbono como los dos tercios más pobres de la humanidad en 2019, a pesar de que las comunidades vulnerables son las que sufren “lo peor”.
Residencia «ilegal», según Futuro Vegetal
Según este grupo, la residencia de Messi es un edificio «ilegal» que el jugador compró por la «exorbitante» cantidad de 11 millones de euros.
El portavoz de Futuro Vegetal, Bilbo Bassaterra, afirmó que «la ley no se aplica igual a todos», ya que cerca de 200 trabajadores en Ibiza fueron desalojados en la misma semana.
La organización también critica a la policía, a la que ve como un «instrumento de represión» para mantener «el orden de las cosas donde la clase dirigente sabe que no serán castigadas».
💥 ACTUAMOS 💥
Tintamos la mansión ilegal de Messi en Ibiza 🧯
La Mansión se trata de una construcción ilegal que el futbolista adquirió por la exorbitante cifra de 11 millones de euros 🤑https://t.co/mslVlqLvfd pic.twitter.com/aK8GUqsr9i
— FuturoVegetal🍒 (@FuturoVegetal) August 6, 2024
Este es el segundo verano que Futuro Vegetal elige Ibiza para protestar. La temporada pasada, pintó con spray un color negro cereza en la discoteca Pacha.
Además, irrumpió en el elegante club de playa Blue Marlin en Cala Jondal con carteles de protesta que decían «Su extravagancia es nuestra crisis climática».
También pintó con spray un jet privado, un Lamborghini y el superyate Kaos, propiedad de la heredera multimillonaria de Walmart, Nancy Walton Laurie.