El nombramiento de Tom Homan como «zar fronterizo» por parte del presidente electo Donald Trump subraya la dirección hacia políticas migratorias estrictas que marcaron su primer mandato.
Homan, veterano en temas migratorios y antiguo director interino de ICE, es conocido por su alineación con las políticas de mano dura en la frontera y fue un defensor clave de la política de «tolerancia cero».
Esto incluyó la separación de miles de familias inmigrantes en la frontera, un procedimiento muy criticado tanto a nivel nacional como internacional que llevó a la separación de más de 5,000 niños de sus padres antes de ser detenido por la presión pública y judicial.
La designación de Homan como «zar fronterizo» refuerza la intención de Trump de implementar políticas aún más restrictivas en el manejo de la inmigración, lo que podría incluir acciones como la aceleración de deportaciones, el fortalecimiento de la seguridad fronteriza, y una posible reactivación de algunas de las políticas más controversiales de su primer mandato.
Tom Homan, quien anteriormente fue director interino del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) durante la administración de Donald Trump, ha sido una figura clave en las políticas migratorias de línea dura en Estados Unidos.
Homan ha apoyado medidas estrictas contra la inmigración irregular, incluidas deportaciones masivas y la detención prolongada de inmigrantes sin documentos.
En la campaña de 2024, Trump sugirió que, en caso de ser reelegido, Homan podría volver a ocupar un rol de liderazgo en la gestión de la inmigración, específicamente enfocado en la ejecución de deportaciones y el reforzamiento de la seguridad fronteriza.
Aunque Trump ha expresado su interés en retomar medidas firmes en la política migratoria, y ha mencionado a Homan como posible encargado, esto dependería de los resultados de las elecciones y de decisiones políticas futuras, ya que actualmente Homan no ocupa oficialmente un cargo para gestionar deportaciones masivas en EE.UU.