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lunes, abril 21, 2025

Si quiere ser valioso ¡Sea usted quien agregue valor!

¡Qué genial es que nos hayamos visto!…  ¡De verdad que solo usted hace las cosas con tanta excelencia!, ¡Gracias, no lo hubiera logrado sin usted!, Te ves feliz ¿Qué te hiciste hoy? Quizás le parezcan que solo son palabras, pero tienen mucho significado para la persona que los recibe, si usted es una persona de valor.

Y es que desde nuestra niñez, las personas amadas, cercanas, o que les hemos dado influencia, tienen un alto valor en nuestra formación. Se nota cuando una persona ha crecido con afirmación en su hogar, a alguien que simplemente ha experimentado abuso de su lugar de crianza.

Una de las cosas más sencillas, pero fuertes, que definen un líder, es si añade valor a otras personas. Muchas veces, puede ser una sonrisa, un mensaje de voz, un apretón de mano, abrir una puerta. No necesitan ser cosas tan elaboradas parar que día con día sumemos en las vidas de las personas.

Algunas cosas que he aprendido, y que le comparto: Añadir valor no es adular. La adulación siempre lleva algo detrás. Añadir valor es un regalo que simplemente se da. Debe de haber un porqué para que se sienta genuino y no debe esperar que la persona que lo reciba, le responda. Lo da porque es merecido y usted es un dador.

Una vez alguien me preguntó como hacía para llegar a un lugar y saludar siempre como el mismo entusiasmo diciendo “Buenos días” habiendo mucha gente que no responde, o hasta lo ignora. Mi respuesta es que para mí si era un buen día. ¡Y simplemente se los compartía!

John Maxwell, contaba la anécdota de como les enseñaba a sus nietos a ser personas de valor. Y lo hacía con helados. Siempre llevaban a hacer mandados y les pedía que, le dieran una iniciativa donde añadiera valor a las personas y al final, tendrían la recompensa del helado. Uno de ellos dijo ¡Fui a la farmacia y le abrí la puerta a más de 50 personas, sonriéndoles y diciéndoles buenos días!

Cosas tan pequeñas, pero genuinas. Le confieso que estamos tan acostumbrados a que nos traten pesado, que la gente hasta piensa mal, o desconfía si usted es una persona que genuinamente añade valor. Ahora bien, cuando observan que simplemente es que usted es así. ¡Le abren todas las puertas posibles a usted! Y me refiero en todos los sentidos, lo invitan, lo recomiendan, le aconsejan.

El gran desafío de añadir valor a otros, es olvidarse del “Yo”, pero créame, también es una gran medicina para el ego. Es completamente liberador dejar de creer que nos lo merecemos todo y lo queremos ya, porque no hay nada más frustrante que descubrir que no es así.

Añadir valor es muchas veces escuchar. O simplemente (Con todo lo que cuesta) permitir que alguien rompa su agenda, con tal de ver eso importante que requiere. Se me hace fácil hablar de añadir valor a las personas, porque ha habido muchas personas que lo han hecho en mi vida. Y llevo una gratitud eterna para con todos ellos. Gente que me ha hecho ver errores, me ha ayudado a crecer en mis habilidades, me ha consolado y sobre todo, me ha contado muy buenas anécdotas que no dejan de arrancarle una carcajada a uno.

Sea una persona de valor. De ese regalo “sin esperar a cambio” despojándose del yo, y verá cuan valioso se hace para mucha gente. Sepa reconocer de manera genuina las virtudes de otro, salude con alegría a las personas y sobre todo, ¡Saque su mejor sonrisa!

Enrique Zaldivar
Enrique Zaldivar
2050 Comunicaciones
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