La situación entre la Secretaría de Salud (Sesal) y los estudiantes de medicina de la Universidad Católica de Honduras (Unicah) está generando una gran controversia.
Lo anterior, especialmente a raíz de las declaraciones de Carla Paredes, titular de Sesal, quien justificó la suspensión del salario beca de estos estudiantes.
Paredes realizó estas declaraciones en base al conflicto que mantiene con los estudiantes de medicina de la Universidad Católica, a quienes le suspendieron el servicio social en el sistema de salud público.
Paredes explicó que, dado que la Unicah no cuenta con un hospital propio para prácticas, el Estado cubre todos los recursos necesarios, por lo que no considera justificado proporcionar un apoyo económico adicional.
«Se invierten millones para que estos chicos (los de la Católica), cuando llegan a mis hospitales, a mis centros de salud —y digo ‘mis’ porque yo soy el Estado, yo soy el gobierno, yo soy la que representa la Sesal— tengan todo lo que necesitan para que su práctica sea viable».
Este conflicto ha llevado a los estudiantes a realizar protestas en demanda de la restitución de la beca, que es de 7,000 lempiras mensuales.
La funcionaria indicó que esto es una mora de 15 años que tiene la Unicah con los estudiantes de medicina.
La diputada y médica Johana Bermúdez señaló que tales declaraciones reflejan una crisis en el sistema de salud y un trato diferenciado que podría impactar negativamente la formación de futuros médicos.
Por su parte, la legisladora Suyapa Figueroa criticó la postura de Paredes como una muestra de una visión elitista entre funcionarios, señalando que el pueblo necesita equidad y oportunidades.