San José. Este miércoles, cuatro policías costarricenses se presentaron ante un tribunal de San José, enfrentando acusaciones por la muerte de un perro, al que atropellaron con sus patrullas.
Los oficiales, de ser encontrados culpables, podrían recibir penas de hasta tres años de prisión.
En las afueras del juzgado, un grupo de defensores de los derechos de los animales realizó una protesta, esperando la llegada de los agentes acusados.
El incidente ocurrió el pasado 9 de agosto en un barrio del este de la capital, cuando los policías, a bordo de dos vehículos oficiales, intentaban salir de una calle bloqueada y atropellaron a un perro que se encontraba acostado en el pavimento.
El suceso fue presenciado por vecinos de la zona, quienes afirman que los agentes no se detuvieron ni mostraron preocupación por el estado del animal.
Las imágenes del incidente, captadas por una cámara de seguridad, se volvieron virales y generaron indignación en la comunidad.
La Asociación para el Bienestar y Amparo Animal presentó una querella penal contra los policías, acusándolos de crueldad y muerte animal.
Los oficiales fueron detenidos preventivamente al día siguiente y suspendidos de sus funciones en la Fuerza Pública.
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En una entrevista del medio digital CRHoy.com, dos de los policías implicados negaron haberse percatado de la presencia del perro.
De la misma manera, rechazaron las acusaciones de haber regresado al lugar para ofrecer dinero a los testigos a cambio de su silencio.
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) llevó a cabo una recreación de los hechos a petición de la Fiscalía, que presentará las pruebas en la audiencia, mientras la defensa argumentará en favor de los oficiales.