Tegucigalpa. El español José Vicente Nácher Tatay tomó este sábado posesión como nuevo arzobispo de Tegucigalpa.
«Con sencillez reconocemos que muchas cosas no están en nuestras manos, pero si decimos aquí están nuestras manos abiertas para alcanzar juntos una Honduras en la que todos podamos vivir con dignidad y equidad», dijo Nácher Tatay.
Durante la celebración eucarística, Nácher Tatay recibió el anillo, el solideo y el báculo pastoral de manos del cardenal Óscar Andrés Rodríguez.
En sus primeras palabras, Nácher Tatay destacó que Dios ha dado a conocer «su voluntad a los humildes y sencillos, cuya preocupación es la verdad y la caridad».
En su discurso, señaló que hay que ser humildes para «saber siempre quiénes somos y cuál es nuestra misión».
El cura español expresó un agradecimiento «muy afectuoso y sincero» al cardenal hondureño, Óscar Andrés Rodríguez.
En enero pasado, el papa Francisco aceptó la renuncia del cardenal hondureño y arzobispo de Tegucigalpa, que deja el oficio de prelado a los 80 años.
Rodríguez Maradiaga fue uno de los ocho cardenales elegidos por el papa para conformar el Consejo de Cardenales para gobernar la Iglesia católica.
Nácher Tatay
Natural de Valencia, Nácher Tatay fue ordenado sacerdote en 1991, es licenciado en Sociología por la Universidad de Alicante.
Asimismo, en Filosofía y Teología por la Facultad de Teología de Cataluña.
El nuevo arzobispo, de 58 años, lloró al recordar a sus padres, Vicente y Mercedes, quienes no pudieron acompañarle por motivos de salud.
«Con humildad y sencillez, así queremos empezar y seguir para permitir al espíritu que sea él quien nos conduzca para que evangelicemos», subrayó.
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Además, afirmó que los cristianos son “conscientes de la paz, como ha expresado el papa Francisco».
Por ello, creen “en la fuerza de la verdad, la justicia, el amor y la libertad como fundamento de un progreso social estable e integral”. EFE