Tegucigalpa. Josué Matamoros, hijo del exfutbolista hondureño Rubén Matamoros, falleció este martes, víctima de un aparatoso accidente de tránsito en el kilómetro 32 de la carretera CA-5, a la altura de Zambrano, Francisco Morazán.
El pequeño Josué estaba luchando por su vida, no obstante, las heridas profundas en su intestino, hicieron que su corazón dejara de latir.
Tras su trasladado al hospital, le practicaron dos operaciones y en una de ellas tuvo un paro cardíaco, pero los médicos lograron reanimarlo para seguir con la batalla.
Pintas de sangre
En ese sentido, la familia del exjugador de Olimpia y Motagua necesitaba pintas de sangre para Josué, lo que le permitiría seguir luchando.
Sin embargo, luego de cuatro días batallando perdió la guerra tras debatirse entre la vida y la muerte en un hospital de la capital hondureña.
Los doctores lo mantuvieron con vida al someterlo a través de medicinas y estaba conectado a un ventilador artificial.
Al momento del accidente, el exfutbolista viajaba con sus tres hijos y junto su esposa, quienes fueron trasladados a un hospital.
Consecuentemente, se confirmó el fallecimiento de la esposa de Rubén, la pastora Jenny de
Matamoros.
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Mensajes de aliento en redes sociales
La Iglesia Evangélica Fuente de Amor envío sus condolencias a la familia, lamentando «el sensible fallecimiento de la Pastora y amiga Jenny de Matamoros».
«Hacemos llegar nuestras más sentidas palabras de condolencias a su esposo Pastor
Rubén Matamoros, a sus hijos y a todos sus familiares y amigos. Orando para que Dios sea su consuelo en este momento difícil», se lee entre los mensajes en las redes sociales.
El accidente de tránsito también provocó fracturas en la cadera, talón y la nariz del exfutbolista, quien está estable luego del golpe el reciente 30 de marzo.
La familia de Matamoros, residentes en Estados Unidos, estaban en Honduras visitando la iglesia y arreglando papeles americanos.