Puerto Cortés. Un miembro de la comunidad LGTBI murió asesinado, en el sector de Baracoa, municipio de Puerto Cortés, zona norte de Honduras.
La víctima fue identificada como Paola Portillo (23), aunque su nombre de pila era Juan Iraeta Mejía.
Se informó que la víctima estaba compartiendo en un lugar en el bulevar CA-13 en el carril que conduce del municipio de Puerto Cortés a San Pedro Sula.
Sin embargo, la víctima recibió una llamada y salió a la esquina, pero recibió varios disparos que le quitaron la vida.
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Un promedio de una decena de personas muere diariamente en hechos violentos, según cifras del Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (OV-UNAH).
Al menos 194 miembros de la comunidad LGTBI han sido asesinados en Honduras entre 2017 y 2022, y el 93 % de esos casos siguen impunes, según el Comisionado Nacional de Derechos Humanos (Conadeh).
Activistas, defensores de derechos humanos y miembros de la comunidad LGTBI consideran que la falta de investigación y la ausencia de una sanción adecuada para los agresores de miembros de la comunidad LGBTI contribuyen a que estos casos queden en la impunidad.