La Cumbre BRICS 2024, realizada en Kazán, Rusia, entre el 22 y 24 de octubre, se centró en temas estratégicos globales, como la expansión del grupo y la cooperación en seguridad y economía.
Los líderes de Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, junto con los cinco nuevos miembros (Egipto, Etiopía, Irán, Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos), discutieron medidas para consolidar la influencia del BRICS en la economía global y abordar desafíos geopolíticos, como la crisis en Ucrania.
India destacó su disposición a mediar en el conflicto entre Rusia y Ucrania, según declaraciones del Primer Ministro Modi, mientras que el presidente ruso, Vladimir Putin, aprovechó la cumbre para reafirmar la alianza entre los países BRICS frente a presiones occidentales.
También se discutió la posibilidad de un sistema financiero alternativo para reducir la dependencia del dólar estadounidense, reflejando el objetivo del grupo de fortalecer su autonomía económica y política globalmente.
Los países miembros de los BRICS han expresado su preocupación respecto al conflicto entre Israel y Hamás, haciendo un llamado al cese de hostilidades.
Por primera vez en 5 años, India y China tienen una reunión bilateral. Alcanzaron un acuerdo histórico entre ambos países para acabar con la crisis sobre su frontera en disputa.
Vladimir Putin anunció que Irán se ha convertido en miembro de pleno derecho de los BRICS, ampliando así el bloque.
La inclusión de Irán también refleja el interés de los BRICS en sumar países estratégicos en términos de recursos energéticos y posiciones regionales clave.
Esta expansión busca fomentar un sistema multipolar que sea menos dependiente de las instituciones tradicionales dominadas por países occidentales.