El jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas de Honduras, Roosevelt Leonel Hernández, tras ser señalado en algunas declaraciones de supuesta inclinación hacia el partido político Libre, negó tajantemente cualquier vínculo de activismo político.
Según sus palabras, su compromiso está exclusivamente en el ámbito militar y en la defensa de los intereses nacionales, no en la política partidista.
Defendió su reciente discurso en apoyo de la Ley de Justicia Tributaria, enfatizando que su intervención no tuvo motivaciones políticas, sino que fue una reflexión sobre la defensa nacional desde una perspectiva económica.
Roosevelt Leonel Hernández argumentó que la seguridad económica es una extensión de la defensa del país y sostuvo que las Fuerzas Armadas tienen la responsabilidad de generar conciencia sobre temas que impactan la estabilidad, como la pobreza y el crimen organizado.
Este enfoque generó reacciones mixtas. La oposición, encabezada por el Partido Nacional, cuestionó el involucramiento de las Fuerzas Armadas en asuntos que consideran legislativos.
Mientras que Rixi Moncada, precandidata presidencial del partido Libre, defendió la postura del Jefe del Estado Mayor y acusó a los nacionalistas de buscar desestabilizar las instituciones militares.
Hernández también señaló que las exoneraciones fiscales que favorecen a ciertos sectores económicos afectan la democracia al limitar los recursos del Estado.
La controversia se profundizó cuando el diputado nacionalista Jorge Zelaya propuso interpelarlo en el Congreso Nacional, aunque Hernández no confirmó si asistirá.