Francisco Javier Ponce, un hondureño de 38 años originario de la Villa de San Francisco, en el departamento de Francisco Morazán, murió el pasado domingo 28 de abril en un accidente de tránsito en Oklahoma, Estados Unidos.
En el siniestro también perdieron la vida José Antonio Trejo González, de 42 años, y Carlos Eduardo Salgado Sánchez, de 19.
En declaraciones ofrecidas a un noticiero hondureño, su hermana, Magda Ponce, relató entre lágrimas que Francisco acababa de saldar la deuda que había adquirido hace dos años para emigrar a Estados Unidos en busca de un mejor futuro para su familia.
«Mi hermanito apenas había terminado de pagar la deuda que sacó para poder irse», lamentó.
Magda recordó que Francisco mantenía un contacto frecuente con sus seres queridos. El jueves 25 de abril respondió a un estado de WhatsApp con el mensaje: “Hermana, los amo y los extraño”.
Un día después, realizó una videollamada para felicitar a su padre por su cumpleaños, mostrando un ánimo alegre.
Asimismo, el sábado conversó con su esposa y, el domingo por la mañana, envió su último mensaje a su hija mayor: «Buenos días, mi princesa, ¿cómo amanecieron?».
Horas después, Francisco perdería la vida en un accidente mientras se dirigía junto a sus compañeros de trabajo a una zona ganadera.
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Cristiana sepultura
La familia Ponce clama ahora por la repatriación de su cuerpo para darle cristiana sepultura en su tierra natal.
«En nuestra casa están nuestros padres con el corazón destrozado; están sus hijos queriendo verlo, para poder darle el último adiós», expresó su hermana, pidiendo a las autoridades que agilicen los trámites correspondientes.
El accidente ocurrió cuando el vehículo en el que viajaban los hondureños colisionó con otro automóvil en Oklahoma, dejando también a un compatriota herido.