Tegucigalpa, Honduras – Un fuerte sismo de magnitud 7.3 sacudió la región del Caribe este sábado 8 de febrero, con epicentro localizado en las Islas Caimán, al norte de Honduras.
El movimiento telúrico, registrado a una profundidad de 10 kilómetros, generó una alerta de tsunami en las costas hondureñas, llevando a la Secretaría de Gestión de Riesgos y Contingencias Nacionales (Copeco) a declarar Alerta Amarilla.
A pesar de la magnitud del sismo, las autoridades de Copeco informaron que hasta el momento no se han reportado daños materiales ni víctimas en el territorio hondureño.
Sin embargo, como medida de precaución, se ha recomendado a la población que se mantenga alejada de las playas y zonas costeras, ante la posibilidad de que se produzcan olas de gran altura.
«Hemos estado monitoreando la situación desde que se registró el sismo y, aunque no tenemos reportes de daños, hemos decidido activar la Alerta Amarilla como medida de precaución», declaró un portavoz de Copeco.
«Es importante que la población siga nuestras recomendaciones y se mantenga informada a través de los canales oficiales».
La Alerta Amarilla implica que las autoridades y la población deben estar preparadas para cualquier eventualidad y seguir las instrucciones de Copeco.
Se recomienda a las personas que viven en zonas costeras que se trasladen a lugares más altos y seguros, y que eviten acercarse a la playa hasta que se levante la alerta.
El sismo también se sintió en otros países de la región, como Jamaica, Cuba y Belice, aunque tampoco se han reportado daños mayores hasta el momento.
Las autoridades de estos países también han activado protocolos de seguridad y se mantienen en constante monitoreo de la situación.
Copeco ha puesto a disposición de la población los números de emergencia 911 y 119 para reportar cualquier incidente o solicitar ayuda en caso de ser necesario.
Se recomienda a la población mantener la calma y seguir las recomendaciones de las autoridades para evitar cualquier riesgo.