El papa Francisco hará este domingo su primera aparición pública tras haber permanecido 37 días ingresado por una neumonía bilateral en el Hospital Gemelli de Roma.
La Oficina de Prensa de la Santa Sede confirmó este sábado que el Pontífice tiene la intención de asomarse desde el hospital poco después de las 12:00 del mediodía para saludar a la prensa y los fieles congregados frente al centro médico y posteriormente impartir una bendición.
Sin embargo, Francisco no pronunciará el tradicional rezo del Ángelus; en su lugar, el texto será distribuido de manera escrita, como ha sucedido en los últimos cinco domingos.
La reaparición del papa cobra especial relevancia, ya que en todo el periodo de hospitalización solo se había compartido un audio y una imagen del Pontífice, lo que había generado gran expectativa entre los fieles y la comunidad internacional.
La Oficina de Prensa del Vaticano informó el viernes que el estado de salud del Santo Padre sigue siendo «estable» con «pequeñas mejorías» en su fisioterapia motora y respiratoria.
En los últimos días, ha dejado de usar ventilación mecánica no invasiva por las noches y ahora solo emplea oxígeno a través de cánulas nasales durante el día, aunque cada vez en menor medida.
A pesar de la recuperación progresiva, los médicos no han indicado una fecha aproximada para el alta hospitalaria. La Santa Sede ha informado que el próximo boletín médico se publicará, como muy pronto, el lunes.
Uno de los puntos que genera incertidumbre es cómo regresará el Papa a la Ciudad del Vaticano y con qué eventuales limitaciones.
El cardenal argentino Víctor Manuel Fernández, prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe y cercano al Pontífice, ha declarado que ha estado en contacto con Francisco y que «está bien físicamente», pero que «le cuesta mucho hablar» debido al prolongado uso de oxígeno de alto flujo.
Según Fernández, el Papa requerirá rehabilitación para recuperar su voz.
Desde su ingreso el 14 de febrero, se ha especulado sobre la resistencia inicial de Francisco a ser hospitalizado debido a un fuerte resfriado que derivó en neumonía bilateral.
Fernández ha confirmado esta versión, asegurando que «el Papa no quería» ingresar en el hospital, pero que fue convencido por «amigos muy cercanos».
El regreso del Papa a la escena pública es visto como un signo de fortaleza y determinación, aunque su agenda futura dependerá de su evolución médica en los próximos días.
Difunden la primera imagen del papa Francisco desde el hospital