El papa Francisco, máximo líder de la iglesia Católica, el primer latinoamericano, marcó un papado muy particular que deja huella en el mundo.
En sus 12 años de papado, la iglesia vivió cambios trascendentales que redefinieron su estructura interna y la percepción global sobre su papel en el mundo.
Una de sus frases célebres fue:
“Que los obispos y los cardenales no sean príncipes, sino pastores, que estén cerca de los pobres, cerca de la gente”.
El legado que deja el papa Francisco

Jorge Mario Bergoglio, nombre de pila del Papa Francisco, tuvo presente su llamado por la paz desde una perspectiva progresista.
Él fue uno de los pocos papas no europeos en la historia de la iglesia Católica.
Su pontificado estuvo marcado por una nueva búsqueda de justicia social, el cuidado del medio ambiente, la defensa de los derechos humanos, entre otra serie de medidas.
Cambió el rumbo de la iglesia
La huella del Papa Francisco será difícil de borrar y se han representado sus posturas más relevantes durante sus 12 años de mandato.
Su llegada como Pontífice
En el 2013, Jorge Mario asumió el papado tras la histórica renuncia de Benedicto XVI y tomó el nombre de Francisco. Su primer desafío fue enfrentarse a una iglesia que había perdido relevancia desde hace muchas décadas.
A lo largo de sus 12 años de mandato, el papa Francisco estuvo al frente de una serie de reformas que buscaron mejorar la estructura de la iglesia.
En el 2022, entró en vigor una nueva Constitución apostólica que descentralizaba la gestión de la Santa Sede y reorganizaba los dicasterios.
Sus decisiones internas y externas ante los fieles marcaron un estilo de papado que ha sido considerado por muchos como una renovación de la Iglesia Católica.
Un breve repaso por su obra
La publicación de la encíclica Laudato Si’, en junio del 2015, ha sido uno de los momentos más emblemáticos de su papado.
El mensaje no solo buscaba la sensibilidad sobre la crisis climática, también convocó a un compromiso global y solidario para combatir el deterioro de la naturaleza.
En el 2018, el papa Francisco marcó un hito en el ámbito político internacional. Anunciando un acuerdo con China sobre el nombramiento de obispos en el país asiático.
Su empatía por los más necesitados se reflejó en su continuo llamado a la paz, la justicia y la protección de los derechos humanos en zonas de guerra.
El papa Francisco fue enfático al condenar los abusos dentro de la iglesia, en el 2024 reconoció que los abusos sexuales a menores eran “la vergüenza y humillación de la iglesia”.
De acuerdo al lugar que tiene la población LGBTIQ+ dentro de la iglesia, el papa reiteró que ser homosexual no era un delito y que todos somos hijos de Dios, haciendo apelaciones al respeto por la dignidad de cada persona.
El legado del papa Francisco será recordado por el intento de modernizar una estructura históricamente conservadora, por haber puesto en el centro valores como la solidaridad, compasión y empatía.
