EE. UU. La Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó este miércoles una ley que autoriza a las autoridades migratorias a detener a inmigrantes indocumentados que cometan delitos menores, como robos.
Esta ley se convirtió en la primera que firmará el presidente Donald Trump en su segundo mandato.
La iniciativa fue aprobada con 262 votos a favor, incluyendo los de la mayoría republicana y 46 legisladores demócratas, mientras que 156 votaron en contra.
Previamente, la propuesta había superado su primer trámite en el Senado el lunes, con 64 votos favorables (12 de senadores demócratas) y 35 en contra.
La ley, denominada en honor a Laken Riley, una estudiante de enfermería asesinada en Georgia en 2024.
Dicha ley, permite que los migrantes indocumentados que cometan delitos menores, como robos en supermercados o tiendas, sean arrestados y puestos bajo custodia del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE).
José Ibarra, un migrante venezolano, fue condenado por el asesinato de Riley.
Negación de visas
Además, la ley otorga nuevos poderes a los fiscales generales de los estados para intervenir en las decisiones de política migratoria del gobierno federal.
Entre otras cosas, permitiéndoles, presionar al Departamento de Estado para que no emita más visas a ciudadanos de países que se nieguen a aceptar deportaciones desde EE. UU.
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La propuesta, impulsada por el congresista republicano de Georgia Mike Collins, ha sido criticada por expertos en derecho migratorio y activistas.
Quienes alertan que vulnera el debido proceso y podría facilitar los planes de deportación masiva prometidos por el presidente Trump.
Según estimaciones de medios estadounidenses, la implementación de esta ley requeriría un presupuesto adicional de más de 3.000 millones de dólares.
Asimismo, un aumento significativo en la capacidad de detención de migrantes, con más de 60.000 camas adicionales para hacer frente a los arrestos previstos.