San José. Las autoridades de Costa Rica detuvieron este viernes a un presunto pandillero de apellido Amaya que es requerido por El Salvador.
El malhechor cuenta con una sentencia en firme por el delito de homicidio, informó el Ministerio de Seguridad Pública (MSP).
El MSP detalló que la detención se llevó a cabo en la ciudad de San José durante un operativo de rutina, cuando al ser abordado por los policías el hombre «se notó nervioso y esquivo» al no portar ningún documento de identidad.
«Se le observaron varios tatuajes alusivos a las maras, por lo que fue llevado hasta la Sección de Dactiloscopía donde se le tomaron huellas dactilares», indica la información oficial.
Las autoridades costarricenses coordinaron con la Interpol y establecieron que las huellas corresponden a un hombre salvadoreño de 33 años de edad, de apellido Amaya, quien tiene en su país una sentencia en firme por el delito de homicidio.
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Amaya, quien aparentemente pertenecería a una pandilla en El Salvador, está en custodia de las autoridades judiciales costarricenses, que procederán a deportarlo a su país próximamente.
Costa Rica superó este martes los 700 homicidios, la cifra más alta de su historia, y la mayoría de estos crímenes son atribuidos por las autoridades a sicarios. EFE