El gabinete de seguridad de Israel votó este martes a favor de un acuerdo de alto al fuego con Líbano, según confirmó un funcionario israelí a la cadena de noticias CNN.
La medida podría poner fin a más de un año de enfrentamientos transfronterizos con Hezbollah y meses de guerra a gran escala, que han dejado miles de muertos y heridos en la región.
En un discurso televisado, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, explicó las razones detrás de la decisión.
Netanyahu señaló que Hezbollah “ya no es el mismo” tras la ofensiva israelí y mencionó tres factores clave para buscar el cese de hostilidades:
- Enfocarse en la amenaza iraní.
- Reabastecer fuerzas militares y equipo agotado.
- Aislar a Hamas en Gaza.
- Intensificación de Ataques Antes del Acuerdo
Horas antes de la votación, Israel intensificó los ataques sobre Beirut, incluyendo por primera vez áreas centrales de la ciudad, más allá de los suburbios dominados por Hezbollah.
Según el Ministerio de Salud libanés, al menos 10 personas murieron en estos bombardeos al centro de la capital.
Un Alto al Fuego con Mirada a Largo Plazo
Aunque el acuerdo aún no ha sido anunciado oficialmente, se espera que el cese de hostilidades de 60 días se base en la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU.
Adoptada en 2006 tras una guerra de 34 días entre Israel y Líbano, esta resolución estipula que Israel debe retirar sus fuerzas del sur del Líbano, dejando solo al ejército libanés y a las fuerzas de paz de la ONU al sur del río Litani.
Este martes, en un gesto simbólico, tropas israelíes llegaron al río Litani por primera vez desde el inicio de sus operaciones terrestres en Líbano en septiembre.
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Impacto del Conflicto
Desde el inicio de la escalada en septiembre, más de 3.000 personas han muerto en los bombardeos israelíes sobre Líbano.
Asimismo, unos 13.400 han resultado heridas, según cifras del Ministerio de Salud libanés.
La comunidad internacional espera que este alto al fuego sea el primer paso hacia una tregua duradera que ponga fin a años de tensión y violencia en la región.
Mientras tanto, ambas partes evalúan el impacto de un conflicto que ha dejado profundas cicatrices.