El proceso de elección de un nuevo papa es uno de los eventos más enigmáticos de la Iglesia católica. Cuando el pontífice fallece o renuncia, los cardenales menores de 80 años se reúnen en Roma para participar en el cónclave, un evento que se desarrolla a puertas cerradas en la Capilla Sixtina hasta que se elige a un sucesor con al menos dos tercios de los votos.
Bajo esta premisa, la película Cónclave, protagonizada por Ralph Fiennes, ofrece una visión ficticia de los juegos de poder que podrían ocurrir dentro de este evento secreto.

La trama refleja las tensiones ideológicas dentro de la Iglesia: desde un ala conservadora, representada por un cardenal italiano que se opone al multiculturalismo y a las reformas postconciliares, hasta un sector progresista que aboga por modernizar la institución, con propuestas como un mayor papel de la mujer en la jerarquía eclesiástica.
El filme, basado en la novela de Robert Harris, explora no solo el funcionamiento interno de la Iglesia, sino también su influencia en la política mundial.

Conspiraciones, alianzas y rivalidades se entrelazan en una historia que, aunque ficticia, se acerca a la realidad de una de las instituciones más poderosas del mundo.
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Conclave ha sido aclamada por la crítica y se perfila como una de las favoritas para los Premios Óscar 2025.
Su meticulosa recreación del Vaticano y la asesoría del fallecido cardenal Cormac O’Connor han logrado una representación que, sin revelar los verdaderos secretos de la Santa Sede, ofrece una mirada intrigante a un evento rodeado de misterio.
conclave (2024) dir. edward berger pic.twitter.com/kX4gO8qVBK
— screencaps (@screenscaps) February 6, 2025