Washington. Autoridades de Estados Unidos dice que el arresto histórico de Ismael «El Mayo» Zambada y Joaquín Guzmán López, dos líderes del Cartel de Sinaloa de México, fue una «operación entre narcos».
Asimismo, detallaron que no implicó ninguna intervención del gobierno de México o de Estados Unidos.
El embajador de Estados Unidos México detalló en conferencia de prensa que Joaquín Guzmán López, hijo del narcotraficante Joaquín El Chapo Guzmán, quien también se encuentra en una prisión estadounidense, se entregó voluntariamente.
Además, explicó que el Mayo Zambada presentaba signos de haber sido secuestrado “contra su voluntad”.
“La evidencia que vimos cuando el Mayo llegó al aeropuerto de Santa Teresa, Nuevo México, muestra que fue secuestrado contra su voluntad”, comentó.
Además, si bien argumentó que se trataba de una operación en solitario de los cárteles de la droga mexicanos, enfatizó la cooperación y presión que los gobiernos de México y Estados Unidos ejercieron conjuntamente.
Capturas históricas
“Estas dos cosas son históricas, pero lo que pasó no hubiera sucedido sin el esfuerzo conjunto que hicimos con México”, enfatizó.
También agradeció al gobierno mexicano «por lo que ha hecho para crear las condiciones en las que podamos alcanzar estos éxitos».
El viernes, el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador dijo durante su rueda de prensa diaria que el gobierno de Estados Unidos “no ha cooperado con información” sobre el arresto de estos magnates mexicanos durante más de dos semanas.
Frente a ellos, Salazar explicó que los informes de su detención habían sido transmitidos a México y afirmó explícitamente que “también fueron transmitidos a la fiscalía mexicana”.