España vive este lunes un apagón eléctrico de magnitudes históricas que colapsó desde las 12:30 del mediodía (hora local) la infraestructura de transporte y comunicaciones de millones de personas en todo el país.
Hasta el momento, el Gobierno no ha ofrecido explicaciones oficiales sobre las causas del corte masivo ni ha proporcionado una estimación precisa sobre la normalización del servicio, aunque se investiga la posibilidad de un ciberataque.
La capital, Madrid, fue uno de los principales escenarios del caos. El metro y los trenes de la red Renfe se detuvieron repentinamente, dejando a cientos de pasajeros atrapados a mitad de trayecto.
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— Ivaannfl (@Ivaannfl) April 28, 2025
Una situación similar se vivió en numerosos edificios, donde los ascensores quedaron inoperativos.
En las calles, los semáforos apagados complicaron aún más la movilidad, obligando a la Dirección General de Tráfico (DGT) y al alcalde José Luis Martínez-Almeida a pedir a los ciudadanos que evitaran desplazarse.
«Si podemos, nos quedamos donde estamos […] estamos todos en una situación complicada», declaró Almeida a la radio pública RNE.
El impacto del corte también se extendió a los principales aeropuertos del país. El Adolfo Suárez Madrid-Barajas y el aeropuerto de El Prat en Barcelona sufrieron interrupciones en el suministro eléctrico, provocando importantes retrasos en las operaciones aéreas tanto de salida como de llegada.
La incertidumbre marcó la jornada: las sirenas se escuchaban en el centro de la capital mientras que algunos colegios decidieron desalojar a los alumnos ante la falta de información oficial. Los hospitales lograron mantener la atención básica mediante grupos electrógenos de emergencia.
En paralelo, el Instituto Nacional de Ciberseguridad (Incibe) confirmó que estudia la posibilidad de un ciberataque contra infraestructuras críticas del país.
Mientras tanto, el Gobierno activó un comité de crisis liderado por el presidente Pedro Sánchez, con la participación de la vicepresidenta María Jesús Montero, el ministro de Transporte Óscar Puente y la ministra de Transición Ecológica Sara Aagesen.
El equipo de emergencia se encuentra reunido en las oficinas centrales de Red Eléctrica en Madrid.
Por su parte, Red Eléctrica informó que trabaja junto a las compañías energéticas regionales y operadores europeos para restablecer progresivamente el suministro.
A las 13:30, comenzaron a recuperarse parcialmente algunas zonas del norte y sur del país, pero la primera estimación oficial advirtió que la normalización total podría tardar entre seis y diez horas.
El apagón también afectó a Portugal, donde Lisboa y otras regiones experimentaron interrupciones eléctricas.
La distribuidora E-Redes atribuyó el problema a una falla en el sistema eléctrico europeo, mientras que algunas áreas de Francia también registraron cortes de energía.
En varias localidades, los ciudadanos no podían realizar llamadas móviles, aunque algunas aplicaciones de mensajería continuaban funcionando.
Asimismo, en Lisboa se reportó la paralización del metro y la interrupción de numerosos semáforos.
Mientras la tensión comienza a restablecerse lentamente en algunas regiones, la investigación sobre las causas del corte continúa en desarrollo, en una jornada que quedará marcada en la historia energética de la Península Ibérica.