Redacción. Este sábado se reportó el trágico fallecimiento de un menor de cinco años, identificado como Josué Ortiz, debido a una bala perdida que impactó en su cabeza durante una balacera en la colonia Echenique, en el municipio de Tocoa, departamento.
Según informes preliminares, el incidente ocurrió cuando sujetos armados disparaban contra un hombre en motocicleta.
Lamentablemente, una de las balas se desvió, alcanzando al menor y causándole la muerte de manera instantánea.
La familia de Josué decidió velar su cuerpo en su hogar, ubicado en la misma colonia Echenique.
Este lamentable hecho resalta la grave situación de violencia que enfrenta el país. De acuerdo con cifras del Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (OV-UNAH), un promedio de nueve personas pierden la vida diariamente en hechos violentos.
Violencia en Honduras
La violencia en Honduras continúa cobrando vidas a un ritmo alarmante, situando al país entre los más peligrosos del mundo.
Las principales ciudades del país, como Tegucigalpa y San Pedro Sula, se han convertido en escenarios recurrentes de asesinatos y extorsiones.
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Las pandillas y el narcotráfico juegan un papel central en la perpetuación de esta violencia, operando con impunidad en muchas zonas donde el Estado ha perdido control.
Los barrios y colonias más pobres son particularmente vulnerables, convirtiéndose en campos de batalla donde los más jóvenes, en su mayoría, son las víctimas principales.