El mundo de la música regional mexicana está de luto. Este 17 de febrero, la icónica Paquita la del Barrio, voz de himnos de desamor y empoderamiento femenino, falleció a los 77 años en su residencia de Veracruz.
Su partida deja un vacío irremplazable en el corazón de millones de seguidores que encontraron en sus canciones un refugio y una forma de catarsis.
Francisca Viveros Barradas, su nombre real, fue mucho más que una cantante. Fue un símbolo de lucha y autenticidad en un mundo dominado por hombres.
Con su voz potente y letras desgarradoras, Paquita se convirtió en la voz de las mujeres que sufrieron por amor, pero que también encontraron la fuerza para levantarse y seguir adelante.
Fallece la reconocida artista mexicana Paquita la del Barrio
Su legado musical es inmenso, pero si hay una canción que la inmortalizó para siempre, esa es «Rata de dos patas».
Un tema que, con su lenguaje crudo y directo, se convirtió en un himno contra la traición y el engaño. Pero, ¿Cuál es la historia detrás de esta canción que resonó en el corazón de tantas personas?
Aunque muchos creyeron que «Rata de dos patas» nació de las propias experiencias de Paquita con sus exparejas, la realidad es que su origen es mucho más complejo.
La canción fue escrita por Manuel Eduardo Toscano, quien se inspiró en un sentimiento de frustración y enojo hacia el entonces presidente de México, Carlos Salinas de Gortari.
En una entrevista, Toscano reveló que la letra de la canción era una crítica velada hacia el mandatario, cuyo gobierno estuvo marcado por la polémica y la sospecha de corrupción.
Sin embargo, en aquella época, criticar directamente al presidente era impensable, por lo que el compositor decidió utilizar metáforas y lenguaje figurado para expresar su descontento.
La canción, con su letra cruda y directa, resonó de inmediato con el público, que la adoptó como un himno contra la injusticia y el abuso de poder.
La interpretación apasionada de Paquita, llena de sentimiento y autenticidad, le dio a la canción una fuerza aún mayor, convirtiéndola en un clásico instantáneo.
A pesar de su éxito, Paquita nunca ocultó que la canción también reflejaba sus propias experiencias personales.
En varias entrevistas, la cantante confesó que se sentía identificada con la letra, ya que había sufrido en carne propia la traición y el engaño de sus parejas.
Hoy, tras la partida de Paquita la del Barrio, su legado musical sigue vivo. Sus canciones, llenas de sentimiento y autenticidad, continúan resonando en el corazón de millones de personas que encuentran en ellas un refugio y una forma de expresar sus propias emociones.
La «rata de dos patas» seguirá siendo un himno contra la traición, y la voz de Paquita seguirá cantando para siempre en la memoria de quienes la amaron.